El mago que luchó contra los nazis
/Hijo y nieto de magos, su abuelo creó en 1873 la ilusión de la levitación. Jasper Maskelyne solicitó de forma continuada su ingreso en el ejército tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial. Tenía 37 años y no había recibido instrucción militar, por lo que no fue alistado hasta que en 1940 logró el ingreso en la Academia de Camuflaje dependiente de los Royal Engineers (Regimiento Real de Ingenieros). El destacamento no había obtenido ningún resultado apreciable en combate, algo que cambió cuando Jasper, como prueba de fuego, decidió crear la ilusión de un acorazado alemán avanzando por el Támesis. Era el inicio de la magia al servicio del arte de la guerra.
El truco le valió el destino a la campaña de África donde tuvo que enfrentarse a los temibles Korps de Rommel. Sus mandos no le tomaban en serio y terminó entreteniendo a la tropa, hasta que la unidad de contrainteligencia le dio su gran oportunidad. Jasper formó un equipo de catorce hombres especializados en diferentes campos que recibió el título oficial de Sección Experimental de Camuflaje, pero que Jasper y los suyos rebautizaron como la «Magic Gang» o el «Ejército Fantasma».
La unidad se mantuvo a la espera hasta que le llegó su primera misión oficial: defender el puerto de Alejandría, puerta de los pozos petrolíferos de Egipto y enclave fundamental para la entrada de suministros del ejército aliado al que Rommel y sus Afrika Korps se acercaban cada día más.
En junio de 1941, tras estudiar detenidamente el puerto y en contra de la maniobra de ocultación que, vista su experiencia, se esperaba de él, Jasper decidió cambiar de lugar el puerto así como todos los buques y barcos que en el permanecían atracados.
Con este objetivo, la Magic Gang creó, utilizando barro, cartón y lona, un falso puerto de Alejandría el cual emplazaría en la cercana Bahía de Maryut, un accidente geográfico muy parecido desde el aire al puerto que trataba de defender. Al ser por la noche cuando la aviación alemana tenía costumbre de realizar sus bombardeos, Jasper replicó de forma exacta todo el sistema de alumbrado del puerto de Alejandría. También hizo uso de cargas de explosivos con las que simular los previsibles aciertos de los Stukas alemanes.
Llegada la noche, las luces del puerto de Alejandría se mantenían apagadas mientras que se encendían las de la Bahía de Maryut donde, finalmente, la aviación alemana estuvo bombardeando durante tres noches sin percatarse del engaño.
A esta le siguieron muchas misiones en las que Jasper y su Magic Gang solventaron con éxito la situación, dándole a los aliados las tan necesitadas victorias en el frente de África. A pesar de ello, Rommel y sus Korps mantenían un imparable avance en el teatro de operaciones, y se le encargó una nueva misión que podía ser determinante para el desarrollo de la contienda: la operación Bertram.
En todas sus anteriores misiones se había utilizado a Jasper y a su Magic Gang como medio de defensa, pero esta vez el general Montgomery decidió poner a Jasper a la ofensiva. Con el control del petróleo en juego, Jasper simuló la preparación de un ataque a las líneas alemanas por el sur, cuando el verdadero ejército permanecía en las posiciones del norte a la espera del movimiento alemán.
Para fingir esta ofensiva, la Magic Gang instaló un incontable número de maquetas de carros de combate, aviones, artillería e infantería, así como simuló la existencia de una línea de ferrocarril y también de un oleoducto. Para dar mayor veracidad a la operación, Jasper empleó también carros de combate reales que luego mandó al frente del norte empleando los ya utilizados escudos solares. Cuando el ejército alemán concentró la mayor parte de sus tropas frente a la ilusión de Jasper, Montgomery y el grueso de su ejército avanzaron por el sur sin dar tiempo a las tropas de Rommel a variar su posición, lo que a la postre supuso su derrota definitiva.