¡La Gran Bestia! El oscuro arte de H.R. Giger, Celtic Frost y Aleister Crowley
/To Mega Therion, el clásico e influyente segundo disco de Celtic Frost, es una de las portadas más salvajes de todos los tiempos. Tras esta se escondía la influencia de Crowley y el mundo oculto
Cuando Tom Gabriel Fischer (aka «Tom G. Warrior») mostró el interior de su casa a unos periodistas, pudimos ver como la tenía decorada con numerosas piezas del ilustrador y pintor H.R. Giger, que en 1969 ya había comenzado su intensa relación con el rock and roll al ilustrar la portada de The Shiver, un álbum de los suecos y psicodélicos Walpurgis en plena era del ácido. Antes ya había hecho algún cartel para otras bandas suizas de rock, como Floh de Cologne. Luego, sus colaboraciones fueron muchas y variadas, como la hermosa portada para Debbie Harry o su amistad con grandes protagonistas de la escena punk y hardcore como Jello Biafra, con quién lucharía codo con codo contra el moralismo de las asociaciones de padres americanas. En 1985, Giger, ya muy famoso desde el éxito de la primera saga de Alien (1979), incluyó una ilustración suya en el disco Frankenchrist de Dead Kennedys titulada «Work 219: Landscape XX» (también conocida como «Penis Landscape»), y que fue incluida como póster desplegable en el disco. La ilustración mostraba una sucesión de imágenes de penes. El disco fue baneado y los Dead Kennedys denunciados.
El mismo año del escándalo de Frankenchrist su cuadro Satan I, realizado en 1977, aparecía en la portada del segundo disco de Celtic Frost, la legendaria banda de trash metal y pionera del black metal antes de que el género existiese. La portada sobrecogía y servía de subtexto gráfico al título de aquel disco maldito: To Mega Therion, tal y como en varias ocasiones se autodenominó Aleister Crowley, el mago ocultista más famoso del siglo XX, o lo que es lo mismo: la Mega Bestia. De hecho, Giger era seguidor de Crowley, aunque le costase entender sus teorías. En una entrevista para ArtSync Magazine afirmó que «intenté estudiar sus libros y su sistema de magia y encontré alguna dificultad para entenderlo». En la portada, un crucificado Jesucristo es utilizado a modo de tirachinas. Therion sería una deidad surgida con la fundación de Thelema, la filosofía y credo mágico de Crowley, pero que ya había sido anticipada en El Libro de la Ley de Crowley (escrito o, más bien, dictado por Aiwass, un ser sobrenatural, en 1904), como contraparte de Babalon.
En los años anteriores a Satan I, Giger había estado en contacto con el ocultismo de una manera muy intensa. De aquella etapa son los cuatro cuadros pertenecientes a la serie The Spell. Una de estos era una adaptación de la famosa ilustración del ocultista del siglo XIX, Eliphas Levi, de Baphomet.
Satan I tuvo su sucesor en Satan II, aunque había cambios en ambas obras. Si en la primera puede verse al fondo un ser sobrenatural (el Mega Therion), en la segunda quién sostiene el tirachinas es una personificación pseudohumana de la muerte y Jesucristo ha sido sustituido por la virgen María.
Desde la famosa portada de Celtic Frost, los miembros de la banda y el misterioso y, con frecuencia, ambiguo y parco Giger se hicieron muy amigos. Fischer le encargó y compró muchas de sus obras y solía verse con Giger, que era fan de la música de Celtic Frost y Hellhammer. Quizás por esto le siguieron otros tantos encargos de bandas de metal, como las cubiertas para Atrocity, Carcass o Triptykon, el proyecto personal del propio Fischer, concretamente para su disco Eparistera Daimones, aunque le recordamos por haber ilustrado la máxima blasfemia, reflejar el aspecto de la Gran Bestia.