El hermoso y secreto lenguaje de los cielos

Los bellísimos manuscritos iluminados de la Edad Media reflejaron los signos del zodiaco sobre el cuerpo humano. Fueron el testimonio de la unión entre la astrología y la medicina con la magia

Los antecedentes de la relación entre los astros y la medicina se remontan a épocas muy oscuras de la humanidad. La astrología, en su acepción más amplia, es la búsqueda de la lógica o el sentido del cielo. Son muchos los libros y manuscritos antiquísimos que reflejan la conexión entre el macrocosmos y el microcosmos, en donde el cuerpo físico no sería otra cosa que una representación de algo mucho mayor que tenía que ver con el mismo universo. A partir de la famosa sentencia «Como es arriba es abajo y como es abajo es arriba», utilizada por alquimistas y magos, se relacionó el cuerpo humano con la astrología y su incidencia sobre ciertas enfermedades. Lo que sucede en los cielos tendría su correlación con lo acaecido en nosotros mismos y el mundo que habitamos. De este modo, los movimientos de los cuerpos celestes se desplazaban sobre los signos zodiacales que habitualmente son representados en la bóveda celeste. El conjunto de estas relaciones y sus interpretaciones supuestamente forman lo que Richard Kremer denomina «el lenguaje en el que los cielos hablan a los hombres entendidos».

Sin embargo, esta relación, según la astrología médica, está relacionada con el mismo cuerpo humano, por lo que el estudio del zodiaco podría influir en enfermedades y dolencias de todo tipo. Desde la antigüedad los tratados esotéricos relacionaron los 12 signos zodiacales con partes del cuerpo y órganos o fluidos, con sus correspondientes dolencias. A partir de la Edad Media se produjeron muchos libros ilustrados que venían a recoger toda esta herencia cultural que partía de los tiempos babilónicos. Esta es una selección de algunos de estos