Libros ocultos (2): el increíble caso del libro encuadernado con la piel del asesino
/John Horwood llegó a ser famoso por partida triple. En primer lugar por el caso que ocupo las portadas de diferentes periódicos de su Bristol natal allá por el año 1821. Horwood, obsesionado más que enamorado de una vecina de nombre Eliza Balsum, usó como forma de cortejo la amenaza ante las negativas de esta a sus pretensiones amorosas.
Extraña forma de demostrar su amor. En un alarde de violencia obsesiva, Horwood llegó a vaciar un frasco de vitriolo sobre su enamorada pudiendo esta escapar ilesa. Menos suerte tuvo en una segunda tentativa en la que Horwood lanzó una piedra contra Balsum que impactó en su cabeza. La herida se complicó y la joven terminó muriendo semanas después. Horwood fue encontrado culpable, como no podía ser de otra forma, y se le ajustició por ahorcamiento, usando para una cuerda corta para que el condenado muriese estrangulado en lugar de la cuerda larga, que provoca la rotura de cuello y por ende una muerte más rápida.
Así que la segunda razón por la que Horwood se haría tristemente famoso es por ser el primer ahorcado en Bristol.
Y por último, llegamos a la tercera y más escabrosa de las razones de su fama. Tras su ejecución, su escarnio no acabo con la muerte: un cirujano llamado Richard Smith diseccionó su cuerpo en una lección pública de anatomía en el Hospital Real de Bristol y decidió que su piel fuese destinada, como la de algunos nobles franceses durante la época del Terror, a encuadernar un volumen sobre su propio caso.
En el lomo, el libro exhibía la siguiente leyenda: Cutis Vera Johannis Horwood (La piel verdadera de John Horwood). El Bristol Record Office, donde se guarda, lo cataloga como Miscellaneous papers etc. re the case of John Horwood executed for murder. Bound in human skin. Un ejemplar, desde luego, único.