El cómic que estaba impreso con la sangre... de KISS
/Lo prometieron, aseguraron que estaban dispuestos a hacer el mayor de los sacrificios por sus fans, la definitiva entrega del mundo del heavy metal por sus fieles seguidores: entregarían a estos un cómic impreso con la misma sangre de la banda.
La historia de Kiss siempre había estado muy relacionada con el mundo de las viñetas. Dan fe de ello los cientos de comics en los que el grupo ha sido protagonista o al menos unos invitados de lujo, o las entrevistas en las que Paul Stanley, su cantante, declaró que gran parte de la inspiración para la creación de los personajes que interpretan los miembros de la banda nacieron de los cómics imaginados por Stan Lee para Marvel Comics.
Editoriales como Image, Dark Horse, Platinum Studios, Archie, entre otras, donde el grupo compartiría protagonismo con las fantasías y obsesiones de los adolescentes. O como el caso de IDW, ultima editorial que ha acogido a los Kiss.
La primera aparición no tendría lugar en una cabecera propia si no en los números 12 y 13 de la colección de Howard el Pato allá por 1977, donde los KISS formarían parte de los sueños del palmípedo protagonista. Meses después, gracias al éxito del grupo, la Marvel le daría su primera portada. Se trataba del Marvel Comics Super Special nº1, de septiembre de 1977. En este cómic se narraba un origen alternativo de la banda, enfrentándose a Mephisto y al Doctor Muerte, clásicos villanos de la compañía de cómics.
Además de por ser la primera aparición como protagonistas de KISS, aquel número tenía como valor añadido, tal y como rezaba la portada, que el cómic estaba impreso con la auténtica sangre del grupo.
Dado que podía parecer un truco publicitario, la extracción de sangre, a la que supuestamente se sometieron los miembros de la banda, se hizo ante un notario que dio fe de los hechos. El momento, fechado el 21 de febrero de 1977, se inmortalizó en unas extrañas fotografías.
Pero no solo eso. También se tomaron fotografías que atestiguarían la mezcla que se hizo de esa sangre con el bidón de tinta roja que se usaría para la impresión de un cómic que, por supuesto, se convirtió en legendario y una buscada pieza para los coleccionistas.