Enamorada de la muerte o la chica que bailó con un esqueleto
/Una serie de provocadoras fotografías de Franz Fiedler, tomadas hace casi un siglo, mostraban a una mujer coqueteando con un esqueleto en lo que posiblemente fue el primer «flirteo» con la Muerte
Franz Fiedler (1885–1956) fue un fotógrafo alemán cuya obra fue en ocasiones extraña y perturbadora, sobre todo en los años de aprendizaje en Pilsen. En 1905 y 1912 trabajó con Rudof Dührkoop en Hamburgo, y de 1908 a 1911 junto a Hugo Erfurth en Dresde.
En la exposición mundial de 1911, en Turín, Fiedler ganó el primer premio. Seguidamente tuvo otra exposición en Praga en 1913. Perteneció al círculo de Jaroslav Hašek y Egon Erwin Kisch y, en 1916, se casó en Dresde, donde ocupó un estudio en Sedanstraße 7. En 1924, Fiedler se convirtió en uno de los primeros fotógrafos profesionales en utilizar una Leica. Después de ampliar su estudio en 1925, participó en la exposición Film und Foto en Stuttgart. También fue autor de una importante publicación sobre la ciudad de Dresde, concebida en el espíritu de Die Neue Sachlichkeit, y que se convirtió en una de las primeras obras ilustradas creadas según los nuevos principios de la fotografía.
El estudio de Fiedler fue destruido en 1945 a causa de la guerra. Todo lo que quedó fue una caja con fotografías. Tras ello, Fiedler, sin su propio estudio, se ganó la vida en la RDA como autor de libros sobre fotografía.
Esta serie de fotografías surrealistas de Fiedler, tomadas alrededor de 1923, muestran a una seductora mujer bailando con un esqueleto. Son, de alguna manera, otra expresión más de la oscuridad y radicalidad artística habituales durante los años de la República de Weimar, una mezcla de artistas oscuros, libertad sexual y provocación. Más que un baile con un esqueleto, es un coqueteo con la muerte. La modelo se muestra insinuante. Quiere seducir a la Muerte, esquiva y lista.
[Vía Vintag.es]