¡Todo el poder para el cine! Una entrevista con el director Melvin Van Peebles
/Gurú de los Black Panthers, fundador del Blaxploitation e inspirador de cineastas como Spike Lee o Quentin Tarantino, Melvin Van Peebles es uno de los últimos exponentes del mundo cultural nacido alrededor del puño negro
Son pasadas las doce de la noche. Me he reunido con Melvin Van Peebles que aún se sostiene sencillo, simpático, extremadamente correcto —cosa difícil para los antiguos realizadores— con un prestigio que se ganó legítimamente. Es uno de los más bellos jefes de la contracultura afroamericana de mitad de siglo XX. La censura racista obligó a circular sus films solo en las «Salas X». Gurú de los Black Panthers, de Spike Lee y Quentin Tarantino. Minucioso contemplador de los fenómenos sociales. Tengo la ocasión de conversar durante veinte minutos con él. Escucho impresionado sus sencillas respuestas y sentido preciso. Sus reflexiones no están allí para reforzarlo sino para cuestionar un acercamiento distinto al cine.
Llegó al cine como por casualidad. Ha hecho cine de autor, teatro, poemas, narrativa y ensayos. Ha convertido narraciones difíciles en hábiles films. Ha desafiado al cine empezando sin saber nada. Descubro a un crudo observador de la realidad más desoladora que rodea a un país en continuas crisis políticas. Quisiera saber algo sobre sus primeras experiencias cinematográficas. Concretamente, ¿cómo ha ido llegando hasta ahora en el cine? El poder calcula un cierto límite y el radicalismo difundido por una minoría ya es un fenómeno mundial que se observa en los Estados Unidos igual que en África, América latina, Japón y Europa.
Los valientes duermen solos: Quisiera hablar de tus películas… de un cineasta joven que ha tratado de buscar una comunicación con el público, y no por razones comerciales, naturalmente, sino ideológicas. Es bastante lógico que los cineastas —que son unos privilegiados en la escala de la sociedad capitalista— encuentren absurdo hacer una película para un sector reducido del público… Quiero decir, hacer una película incomprensible incluso para quien la hace. ¿Crees que la tarea del cine es llevar el mayor número de espectadores a tomar conciencia de un argumento basado en ideas, y que esta es una obligación moderna y revolucionaria?
Melvin Van Peebles: ¡Muy buena pregunta! ¡Absolutamente! Creo que se trata de ese aspecto de la industria, un aspecto muy importante de la industria. Un punto muy importante, que todos lo saben, está ahí, pero, por otro lado, todavía tiende a ser menos importante.
Los valientes duermen solos: Técnica o culturalmente, ¿qué directores están más cerca tuyo? ¿Quiénes han contribuido decisivamente a tu formación dentro y fuera de ella? Me atrevo a decirte que Sweet Sweetback's Baadasssss Song (1971) es una película como para reírse cuando en realidad habla seriamente de problemas importantes. ¿Es tu trabajo un cine de circunstancias? ¿Son experiencias útiles en la vida de un director?
Melvin Van Peebles: ¿Alguna vez me he parado a pensar en eso? (risas) Sweetback fue la película independiente más taquillera de su tiempo. Los cineastas reconocerán que nunca antes se había tomado en serio una película independiente. Y luego, otras personas dirán: «Oh, empezaste todo el mundo del Blaxploitation».
Los valientes duermen solos: ¿Era todavía demasiado complicado? ¿Era demasiada información para transmitir? La película fue autoproducida con el préstamo de Bill Cosby… ¡50 mil dólares! La censura racista la tachó de pornográfica. Tuvo que proyectarse en las salas X. Esto significa renunciar a todo un mundo de convicciones fáciles…
Melvin Van Peebles: Eso es cierto, pero es mucho más que eso. Pero hemos aprendido a esperar ese tipo de tratamiento todo el tiempo. Y francamente, para ser honesto, no me molesto ni siquiera en pensarlo.
Los valientes duermen solos: Ya no se trata de asombrar al espectador como de presentar cosas nuevas que le agiten, que le golpeen. Sigues filmando sobre la salvaje explosión psíquica. ¿Dónde comienza y termina el plano?
Melvin Van Peebles: Realmente, nunca he estado en el retiro. Nunca he pensado en la jubilación.
Los valientes duermen solos: Más que teorías necesitamos experiencias, que son la fuente de la teoría. Podría pensarse que un hombre como tú… que ha sido alquilado por piromaniáticos de la explotación negra, la Blaxpotation, para perfeccionar más lo incendiario, pues eso… tendría que empezar a pensar, llegado a cierto punto, que él también es un criminal. Pero la fama y el dinero pueden hacer maravillas en orden a salvaguardar el sentido de la inocencia propia.
Melvin Van Peebles: Así es…
Los valientes duermen solos: Así es como la trabajosa búsqueda de un éxito rápido y espectacular prende y se manifiesta por todas partes. Tan fácil como decir: bueno, esto lo vamos a hacer por el puro gusto de hacerlo. No ha de costar nada, no implicará ningún riesgo económico, será jugar con un material inmenso, enorme, esperemos que resulte grande de verdad… Esta conversación exige una hora entera [risas]
Melvin Van Peebles: Así es… eso es un espectáculo de negocios. Y no puedes escaparte mucho. He visto grandes proyectos y también pequeños proyectos. Quiero decir, no es nada nuevo. Ocurre no solo en el negocio del cine… Se suele pasar por alto, y eso es lo que es tan importante, un aspecto crucial, incluso, de la industria. Quiero decir, para estar preparado tienes que realmente revisar y volver a verificar siete veces más lo que estás haciendo. A veces, las personas se dejan llevar. ¿Sabes a qué me refiero?