¡Es un anarquista! Mateo Morral dejó escrito en un árbol su plan de magnicidio
/¡Es un anarquista! Era el mes de mayo de 1906 y el anarquista Mateo Morral estaba en Madrid dispuesto a acabar con la vida de Alfonso XIII. Aún no había recibido el artefacto, la «máquina infernal» que lanzaría oculta en su célebre ramo de rosas.
Días antes de cometer el atentado, Morral no dudó en detenerse frente a un árbol del Retiro y, tras sacar su navaja, dejó inscrito sobre su corteza lo que se disponía a hacer. «Ejecutado será Alfonso XIII el día de su enlace. Un irredento» junto a la firma «Dinamita», pudo leerse en un árbol durante un tiempo (protoemoticono incluido).
Pero lo sucedido es más sorprendente aún. Un individuo, mientras paseaba con sus hijos, vio como dos hombres estaban sentados en un banco delante de un árbol y se entretenían alternativamente en grabar o pintar algo en la corteza. «Ambos vestían muy decentemente, uno con gorra japonesa y el otro con sombrero flexible de los llamados Frégoli», afirmó. Les llamó la atención e increpó. Pero le contestó Morral: «¿A usted qué le importa lo que estemos haciendo?», preguntó airado. Al día siguiente, realizando su paseo acostumbrado con su hijo, volvió a pasar ante el árbol y quedó asombrado al ver lo que había tallado en la corteza. Tras el atentado, lo recordó y puso a la policía tras la pista.